Sunday, February 10, 2008
Colaboraciones intraperonales de medio día...
Aquí estamos, yo y todos los personajes que se sortean mi realidad física, a medio camino a través de un martini que me quedó muy seco. Demasiado seco quizás para ser tan temprano. La verdad es que me quedé con las ganas ayer de empezar la noche con el último martini que podría estrujar de mi botella de Beefeater, pero ya que el tiempo no alcanzó, me lo confeccioné hoy. Reitero mi confesión de que fue demasiado temprano para un aperitivo de ese calibre, pero me escudo en la excusa que confuso por la estadía de mi sobrina de 2,5 años en el hogar de mi padre donde resido, y el despertar violento que eso significa, me hallé envuelto en una dinámica irreflexiva. Cabe destacar que no recibí gran resistencia de parte de mi madre para confeccionar el aperitivo frente a sus narices, sólo una sanción verbal leve. Respondí a ella con las palabras: "breakfast of champions", y seguí mi camino.
Mañana me embarco en una nueva aventura. Nada demasiado elaborado ni sofisticado, sólo un recorrido en auto por latitudes más australes, tanto en territorios correspondientes a la organización llamada Chile como a algunos de la organización vecina del Este. Seguramente el desafío estará en sortear los asuntos humanos de la agrupación que se ha conformado, la cual tan sólo en una de sus descripciones más superficiales deja entrever que estamos buscando problemas: Una pareja heterosexual donde él es borracho y drogadicto (dentro de tantas otras cosas), una pareja homosexual masculina donde yo soy un hijo de perra (dentro de tantas otras cosas) y un soltero libidinoso que nunca se ajustará a ningún molde (dentro de tantas otras cosas). Mayores detalles de cada uno de estos individuos me los reservo por el momento. Sólo espero que la homeostasis del grupo no me instale en un rol de desgaste como ya tantas veces lo ha hecho en el pasado. Lo único que busco es un poco de paz, espero obtener al menos 20 minutos de ella en las tres semanas que vienen....
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