Thursday, July 15, 2010

 

Old juice

Hoy por hoy, el tiempo pasa tan rápido... me parece sorprendente leer mis últmos escritos porque tanta agua ha pasado bajo el puente. El penúltimo de éstos data de un momento previo a mi viaje vacacional de fin de carrera... a ese individuo lo considero un niño de pecho. La última entrada es justo a la vuelta de tal viaje y a ese personaje también lo considero un pobre niño inocente. Claro, yo también soy un niño, y mi padre que cumplió la edad de júbilo, también es un pobre niño perdido en el supermercado... pero sigue siendo sorprendente que nuestros avances en experiencia personal impliquen cambios de actitud tan grandes, aún cuando lo único que realmemnte se conserva en un es la capacidad de percibir. Lo siento, ahora soy budista y tengo que promover el Dharma...

Me parece estupendo haberme acordado de este medio de proyección o quién sabe qué... de hecho, algunas cosas no han cambiado mucho... unos tres posts más abajo hablo bajo la influencia de un martini dry... y aquí me hallo en el presente, bebiendo el primreo de muchos de los martinis de la indepencencia... upps, verdad que es el segundo de la noche.... bueno, forma parte del mismo evento...

Y sí, estoy borracho... mucho más de lo que tenía previsto. Pensé ingenuamente que el hecho de no haber comido podría ser obviado por mi organismo al recibir gin Tanqueray con una dilución minúscula con un fermentado snonb... pero no... mi organismo está reaccionando alineado con las leyes de la naturaleza y está siendo bastante difícil mantener el funcionamiento normal... quizás tengamos que entrar en modo de emergencia...

Sería buenísimo hacer una crónica de la vida dentro de la máquina... con algunos tinetes de la desesperación de las pulsiones de un príncipe en decadencia... junto a las disloluciones de un fading ego... lo retomaremos muchachos?

Ahhh... tanta agua bajo el puente... tantas cosas inabordables... tanto aprendizaje de la inutilidad...

Bueno, antes de jugosear de sobremanera (guau! que palabra tan magnífica y tan dejada de lado por ages...), me remito a mi casillero personal... no sé si pueda recuperarme de ese par de combos etílicos que acabo de ingerir...

Habrá más... me he sentido como en casa...

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